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La tecnología y el trabajo colaborativo para hacer frente a la crisis económica

“El talento gana partidos, pero el trabajo en equipo gana campeonatos” Michael Jordan

A principios de marzo que comenzaban a presentarse los primeros casos de COVID-19 en México, tomé la decisión de trabajar desde casa y hacer lo que conocemos como “Home Office”. No era algo nuevo para mi y para mis colaboradores, ya que el modelo de trabajo que ejecutamos es por resultados. Sin embargo, esto se fue complicando porque una parte de nuestro mercado local y regional, en su mayoría, estaban acostumbrados a las negociaciones “cara a cara”.

Otro factor, que representaba un reto importante a superar, era lograr armonizar el trabajo profesional, las labores domésticas y el cuidado de los hijos, lo cual no es nada sencillo. Y ahora lo sabemos también los varones gracias a esta pandemia.

Bueno, pues a todo lo anterior también se le agregó el estrés que provoca el aislamiento social, el cual está considerado como un factor que afecta el estado de ánimo de las personas y por ende su productividad. Y sumándole la incertidumbre por una economía débil en el país, era evidente que mantener o elevar la competitividad parecía ser una tarea casi imposible de cumplir.

Esta crisis sanitaria, social y económica provocada por el COVID-19, ha resaltado por mucho la importancia de la tecnología para los seres humanos. Los dispositivos tecnológicos se han convertido en la herramienta principal para trabajar, comprar, vender, aprender, jugar, ejercitarse y hasta reunirse con familiares y amigos. Según un estudio de World Economic Forum, los dispositivos tecnológicos tienen un rol protagónico para mantener a la sociedad funcional durante la cuarentena. E incluso se estima que puedan tener un impacto más allá de la pandemia.

Otro aspecto que ha ido incrementándose notablemente es lo que se conoce como trabajo colaborativo, o lo que algunos llamamos “sinergia profesional”. Ya que si bien la tecnología, como herramienta principal, nos permite estar conectados 24/7, es muy importante dimensionar la enorme oportunidad que tenemos para lograr hacer alianzas con profesionales y especialistas en cualquier parte del mundo. Y que esto tenga como resultado poseer equipos especializados y de alto rendimiento para atender el sector donde competimos. Y hacerlo estando más fuertes, más sólidos, con mejores tiempos de respuesta, con ideas más innovadoras, con más experiencia y muchos otros atributos que el nuevo mercado exige.

Este 2020 nos ha enseñado mucho, el uso de la tecnología se encuentra en su punto más alto en gran parte del mundo, aun cuando en algunas regiones está en crecimiento y en otras se va consolidando. Esto genera grandes oportunidades de negocio que todavía no se han descubierto, o mejor dicho, no se ha creado la necesidad.

Sabemos bien que hay muchas tendencias para el 2021, pero en una opinión personal, considero que el comercio electrónico y digital será una de las más preferidas y la que seguirá creciendo potencialmente. Seguido del internet de las cosas (IoT) y, por último, la realidad virtual o realidad aumentada, la cual también tendrá un impacto alto.

Como sabemos, el COVID-19 ha transformado el mundo, no estábamos preparados para afrontarlo. Pero hoy la tecnología en medio de toda la incertidumbre ha logrado salvar a muchos negocios y organizaciones que antes de la pandemia consideraban a la tecnología un lujo. Y hoy es una necesidad básica y principal.

Pero la tecnología por sí sola no es definitiva para lograr el éxito, pues para lograr el éxito en lo negocios es una combinación de muchos factores. Entre los que hoy, en medio de la pandemia, se destaca el trabajo colaborativo que podemos fortalecer con alianzas estratégicas para lograr hacer la diferencia en un mercado más reducido en recursos, pero más amplio en competidores.

Para ir cerrando el tema, les comparto algo que me sucedió hace un par de semanas. Me encontraba revisando pendientes y contestando algunos mails, cuando de repente en un grupo de whatsapp me comparten un requerimiento para un Consejo de Ciencia y Tecnología de una entidad del país. Una vez leído se me prendió el foco, y contacté a la persona que puso el mensaje para platicar. Me explicó el requerimiento del servicio y prácticamente me dio 48 horas para emitir una propuesta técnica y financieramente sólida.

Tenía un buen reto porque iba competir con alrededor de 6 a 10 propuestas a nivel nacional. Entonces, para poder ganar, primero tenía que hacer una propuesta con un presupuesto idóneo, que fuera técnicamente sólida y con un buen equipo de trabajo. Para hacerlo en tan corto tiempo le marqué a dos colegas, uno ubicado en Guadalajara y la otra ubicada en CDMX.

Platicamos, los invite a presentar juntos el trabajo, nos lo dividimos para armarlo entre todos. Sólo tuvimos una reunión de arranque y, antes de enviar la propuesta, una reunión de cierre, todas virtuales. Para la elaboración del documento nos apoyamos con algunas herramientas tecnológicas para trabajar todos sobre una misma versión de la propuesta. Concluimos y sometimos nuestro trabajo en tiempo y forma… Una semana después nos notifican que nuestra propuesta fue la más atractiva y sólida. Actualmente estamos formalizando y a punto de iniciar el Estudio.

Les invito a buscar alianzas y/o sinergias colaborativas. En estos tiempos de pandemia y crisis económica la combinación de tecnología con equipos de alto desempeño marcarán la diferencia para poder sobresalir en el mercado. ¿Ustedes que opinan?